Flechas en Manos del Valiente

📖 Salmo 127:4 – “Como saetas en mano del valiente, así son los hijos habidos en la juventud.” (RVR1960)

✨ Reflexión espiritual

Dios, en su sabiduría, nos da una imagen poderosa: los hijos son como flechas en manos de un valiente. Esto no es una descripción pasiva. Habla de intención, de dirección, de propósito… y de responsabilidad.

Un arquero no lanza flechas al azar. Las prepara, las afila, las dirige. Así también, los padres no están simplemente para observar cómo sus hijos crecen, sino para formarlos, guiarlos y enviarlos con dirección hacia el propósito de Dios.

Pero, ¿qué sucede cuando los hijos ya crecieron? ¿Cuando están lejos, ya no escuchan como antes, o han tomado caminos que duelen? La respuesta está en el carácter del valiente. El valiente no se rinde. No baja su arco. No dice: “Ya es muy tarde”. El valiente vuelve a tomar su lugar, con fe y amor.

Nunca es tarde para influir. Nunca es tarde para enseñar, corregir, orar o volver a sembrar la Palabra. Dios es especialista en restaurar trayectorias. Aún una flecha que parecía torcida puede ser redirigida por el poder de Dios.

Tus hijos, sin importar su edad o situación actual, siguen siendo parte del plan de Dios. Sigue afilando esas flechas: con oración, con ejemplo, con fe.

🙏 Oración

Señor, gracias por el regalo de los hijos. Ayúdame a ser un valiente en tus manos. Dame sabiduría para guiarlos, paciencia para amarlos y fe para confiar en que Tú puedes obrar en sus vidas, sin importar la etapa en la que estén. Que mi ejemplo sea una luz que los acerque a ti. Amén.

❓ Preguntas para reflexionar

• ¿Qué tipo de influencia espiritual estoy teniendo en mis hijos hoy, sin importar su edad?

• ¿Hay algo que necesito corregir o restaurar en mi relación con ellos?

• ¿De qué forma puedo enseñarles (o seguir enseñándoles) la Palabra de Dios: con palabras, acciones o testimonio?

• ¿Estoy orando de forma específica por cada uno de mis hijos y sus necesidades?

• ¿Qué “flechas” necesito afilar hoy — en amor, en ejemplo, en oración — para lanzarlas con dirección hacia el propósito de Dios?